La tata en casa
La llegada de un bebé marca un antes y un después en todos los aspectos de la vida de la pareja y
el sueño es uno de ellos. El pensar en volver a dormir plácida y despreocupadamente toda la noche
es realmente un sueño.La realidad no es una pesadilla pero se parece bastante.
De todas formas existen técnicas que se pueden poner en práctica para enseñar al bebé a dormir.
A dormir se aprende, como a comer o a caminar.
Los 10 consejos básicos:
Aquí encontrarás 10 consejos que deberías poner en práctica para enseñar a dormir al bebé y de esta manera
poder dormir vosotros también. Adelante, esto no es una misión imposible, porque ya alguna vez se dijo: "Todos los bebés finalmente se duermen..."
1.- Verstimenta adecuada: Asegurate que el bebé tenga una vestimenta adecuada para dormir, que se sienta cómodo, que no pase ni frío ni calor.
2.- Respetar los horarios de sus comidas: Es importante establecer unas rutinas en sus comidas, especialmente en bebés que empiezan a comer sólidos. No es recomendable acostar al bebé inmediatamente después de cenar, debemos dejarle unos minutos para que comience el proceso de digestión y evitar que le siente mal.
3.- Intentar darle su última comida antes de las 22h. Después de esta hora los cólicos o algunos trastornos digestivos podrían molestarlo para dormir o despertarlo durante la noche. Recordar que el sueño es otra rutina que se establece, además todos tenemos un reloj biológico que se puede modificar. Si acostumbramos a nuestro hijo a darle un biberón en la misma cuna o a ciertas horas de la madrugada, él establecerá ese hábito como una rutina cotidiana y siempre lo pedirá. Los niños mayores de 6 meses que no toman lactancia materna pueden llegar a dormir toda la noche sin necesidad de un biberón durante la noche. Mejor no establecer esa rutina si no queremos tener que levantarnos todos los días a la misma hora.
4.- Enseñarle a diferenciar el día de la noche: Enseña a tu bebé a reconocer la noche y el día desde muy pequeño. Luz y ruido durante el día, oscuridad y silencio durante la noche. Caemos en el error de pensar que si todo está a oscuras y en silencio el pequeño descansa mejor pero es necesarios que los sueños durante el día sean cortos, no más de dos horas para crear un buen hábito de sueño. A continuos os ponemos un ejemplo de horario de sueño para bebés a partir de los 6 meses:
Para bebés menores de 12 meses Para niños de más de 12 meses:
- Si se despierta antes de las 8 de la mañana. - Desayuno de 8:00 a 8:30
- Sueño de 9:00 a 9:30 - Juego y actividades con él
- Comida de 12: 00 a 13: 00 - Comida de 12: 00 a 13: 00
- Siesta de 13: 00 a 15:00 - Siesta de 13: 00 a 15: 00
- Merienda de 16: 00 a 17:00 - Merienda de 16: 00 a 17: 00
- Siesta breve de 17: 00 a 17: 30 - Baño de 20: 00 a 20:30
- Baño de 20: 00 a 20:30 - Cena a las 21:00
- Sueño noche a partir de las - Sueño a partir de las 21: 00 21:00
5.- No lo acunes en brazos: Sólo debes meterle en su cuna, darle un beso ,cantarle una canción o contarle un cuento. De esta forma se establecerá una rutina que le ayudará a dormir. Es importante que antes de quedarse dormido el niño reconozca donde está y que sea su cuna el lugar que le haga sentirse más seguro.
6.- Intenta que un muñeco que le guste le acompañe en la cama: Un muñeco especial puede ser una buena compañía a la hora de acostarse y un buen apego o protector si se despierta por la noche.
7.- Si llora no lo lleves a tu cama: Si estableces esa nueva opción te la pedirá siempre que se despierte y se sienta inseguro. Además todos sabemos lo constante que puede ser un niño y cómo puede llegar a llorar para conseguir lo que quiere. Si el pequeño se despierta por la noche y se mete en vuestra cama os recomendamos que lo acompañeís a su habitación, turnándote con tu pareja hasta que logre dormirse otra vez. Este paso puede durar varios minutos o incluso horas, paciencia, si nos rendimos estamos perdidos todos los días será esta misma lucha, sin embargo si el niño acaba aceptando que no hay otra opción que dormir en su cama no tendrá más remedio y quién se acabará acostumbrando será él.
8.- Si vuelve a llorar , tarde cada vez más en ir a su habitación. Alargar los tiempos de espera para entrar a consolarle. Incrementa los tiempos de 5 en 5 minutos, obligate a ver un reloj para no caer en la tentación de entrar antes de tiempo a calmarle. Los niños que cada vez que lloran sus padres acuden a consolarlos se convierten en niños exigentes. Son los padres los que deben decidir cuándo entrar a calmarlos. De esta forma el bebé no se acostumbrará a que alguien acuda inmediatamente cada vez que él llore.
Un ejemplo de tiempos para entrar a calmarlo sería:
- Esperar 1 minuto y entrar, decirle que no llore y salir lo antes posible.
- Esperar 3 minutos y entrar. " ".
- Esperar 5 minutos y entrar. " ". ( repetir este tiempo tres veces)
- Esperar 10 minutos y entrar. " " (repetir este tiempo varias veces hasta que
notemos que la intensidad del llanto mengua, en ese momento seguir aumentando 5 minutos más al tiempo de espera,
15´ 20´25´...)
9.- Establecer una rutina para ir a dormir: Inventa una ceremonia de ir a dormir, que se repita sistemáticamente y pueda ser desempeñada por cualquier persona, en caso de tu ausencia. Puedes contarle un cuento, cantarle una canción en el mismo horario todos los días hasta que se establezca la rutina del sueño. Si creamos una rutina previa a ese momento el niño conocerá lo que va a ocurrir y se sentirá más dispuesto a cumplirlo.
10.- Respeta y haz respetar estas reglas: No permitas que las personas que lo cuidan en tu ausencia rompan estas reglas. Recuerda cumplir estas reglas con firmeza y afecto para que el bebé aprenda a conocer cuáles son sus límites.
A dormir se aprende





